Cada época del año requiere una serie de cuidados específicos para tu mascota, que se deben adaptar a la bajada de temperatura, a la mayor humedad, a menos horas de sol.

Hay que tener en cuenta sus costumbres, si vive dentro o fuera de casa, dónde pasa la noche. Y además la raza, la edad y las características de nuestra mascota.

EDAD: Tanto los cachorros como los perros de edad avanzada son los que pasan más frío ya que su capacidad para regular la temperatura corporal no es tan eficaz como ocurría en perros jóvenes y adultos.

TAMAÑO: Los perros de razas más pequeñas pierden el calor con mayor rapidez por lo que tienen tendencia a tener más frío.

PELAJE: El pelaje de un animal actúa como “abrigo” frente al frío, de modo que aquellos animales que presenten un pelaje más grueso y largo estarán más protegidos ante las bajas temperaturas.

COMPLEXIÓN: Aquellas razas que presenten una complexión más delgada y con ello una menos grasa corporal pueden pasar más frío.

Cómo podemos saber si nuestra mascota está pasando frío

-TEMBLORES: Si observamos temblores cuando el animal está fuera, es probable que tenga demasiado frio para pasear.

-OREJAS y PATAS FRÍAS: Las orejas nos pueden servir como un indicador. Si están frías, especialmente en la zona de los bordes, es hora de regresar a casa a un lugar caliente. Las extremidades del animal son especialmente sensibles al frío por lo que debemos prestar atención. Si el animal comienza a cojear puede que sus patas estén demasiado frías.

-LENTITUD: Si el animal no quiere caminar o lo hace con lentitud es probable que tenga frío. Si observamos que se intenta esconder o se nos pega mucho es probable que esté intentando protegerse.

-ACURRUCARSE: Cuando los perros tienen frío, intentan calentarse con su propio cuerpo. Si se acurruca o está encorvado con la cola metida hacia adentro, es probable que tenga frío.

–SOMNOLENCIA: Si el animal muestra mucho sueño o letargo ante el frío podemos estar ante un caso de hipotermia, Lo cual podría ser muy grave.  También podríamos observar torpeza. En ambos casos lo más recomendable es llevarlo adentro donde pueda calentarse y si se encontrara rígido o mostrará dificultades para respirar o apenas se mueve debemos acudir de forma inmediata al veterinario

Qué debemos hacer para evitar que pase frío

El lugar para dormir y los paseos

Si tu mascota suele vivir en la calle, al aire libre, su pelaje y grasa corporal se van adaptando poco a poco, conforme van bajando las temperaturas

Si vive dentro de casa, cuando salga a la calle, si la temperatura es muy baja, sí puede sentir frío, especialmente si es de pelo corto, o es tiene poca grasa corporal. Si tú te pones el abrigo para salir a la calle, a tu mascota también debes abrigarla.

La alimentación

El frío hace que todos gastemos más energía: el hecho de mantener la temperatura corporal requiere un mayor consumo de calorías.
Es por eso que durante este período las mascotas que viven en la calle, deben comer un poco más, pero siempre de su pienso, no le des comida casera, que puede sentarle mal.

Si tu mascota vive dentro de casa, en invierno pasará más tiempo acurrucado y durmiendo, gastará menos energía, por eso en estos casos, ojo con el sobrepeso.

Los bañosEn verano solemos bañar a los perros en el campo, o dejarlos que se sequen al sol, en invierno esto es distinto, cuando debas bañarlo, deberás emplear más tiempo en su secado, que no quede nada de humedad, lo recomendable, llevarlo a la peluquería, allí tiene los secadores y expulsadores de agua adecuados, y dedican el tiempo necesario para su secado-

Y evita cortales el pelo demasiado en esta época del año, el pelo siempre hace de “abrigo” para tu mascota.