La toxoplasmosis se trata de una enfermedad infecciosa ocasionada por un parásito: el Toxoplasma gondii. En la mayoría de los casos la infección es asintomática y como mucho se asemeja a una gripe.

En el caso de mujeres embarazadas o personas inmunodeprimidas sí es más importante tener especial atención con esta enfermedad. En las mujeres embarazadas ya se hace de forma rutinaria en los hospitales el análisis para detectar si se tienen Ac. Si es así no hay peligro, pero si el título sale negativo sí que se deben tomar ciertas precauciones.

Las vías de infección de la toxoplasmosis son cuatro

• Teniendo contacto oral con tierra, agua y hortalizas infectadas.
• Comiendo carne cruda o poco hecha que esté infectada.
• Teniendo contacto oral con heces de gato infectadas.
• Por transmisión congénita (de madre a hijo a través de la placenta).

En la mayoría de los casos el gato de casa no es el transmisor, y siguiendo unas pautas básicas de higiene se puede evitar el riesgo de contraer toxoplasmosis.

El gato como portador del parásito

El gato es el único animal que puede transmitir la forma contagiosa del parásito, aunque muchos animales, incluyendo el ser humano, pueden ser portadores del mismo en los músculos.

Para que se produzca esa transmisión deben de darse las siguientes coincidencias:

1. El gato debe infectarse comiendo un ratón, un pájaro o carne cruda. Si nuestro gato no sale de casa y come pienso, no se puede infectar.
2. Si el gato se infecta, solo libera el parásito en sus heces una vez en su vida, durante unas pocas semanas. Aunque se infecte de nuevo ya no vuelve a liberarlo.
3. Para que el parásito de las heces sea contagioso, estas tienen que estar en contacto con el aire al menos 24 horas. Por lo tanto limpiando la bandeja a diario, este riesgo no existe.
4. Para infectarse con este parásito, se tienen que manipular las heces con las manos y tiene que haber contacto oral con las mismas. Para que no pase nada, basta con limpiar la bandeja con pala y guantes desechables.

Pautas básicas de higiene a seguir para evitar el contagio de toxoplasmosis

• Lavarse la manos varias veces al día.
• Quitar las heces de la bandeja, a diario y con una pala.
• Limpiar la bandeja con agua caliente.
• No dar carne cruda al gato.
• Evitar que el gato cace.
• Realizar los trabajos de jardinería con guantes.
• No comer carne cruda o poco hecha y pelar las hortalizas o lavarlas antes de comerlas.

La toxoplasmosis no debe ser un motivo para abandonar a nuestro gato.

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